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Ventajas de la puerta seccional vs levadiza convencional

Al diseñar un garaje o un acceso vehicular, una de las decisiones más importantes es qué tipo de puerta elegir. Durante años la puerta levadiza convencional fue la más utilizada; sin embargo, las puertas seccionales han tomado ventaja por su desempeño, seguridad y estética.

Aunque ambas cumplen la misma función, el comportamiento en el día a día es muy distinto. Para instaladores, arquitectos y empresas constructoras, entender estas diferencias evita reclamos y mejora la propuesta técnica.

La puerta seccional está formada por paneles que se deslizan por guías y se alojan paralelos al techo interior del garaje. La levadiza gira como una sola hoja hacia afuera. Esa diferencia influye directamente en espacio, mantenimiento y seguridad.

Ventajas clave de la puerta seccional
  • 1. Mejor aprovechamiento del espacio. No invade la vereda ni el vehículo al abrir.
  • 2. Mayor seguridad y hermeticidad. Reduce filtraciones y es más difícil de forzar.
  • 3. Instalación más limpia. Herrajes y guías estandarizados, montaje rápido.
  • 4. Transporte más fácil. Llega desarmada en paneles, menor volumen y costo.
  • 5. Menor mantenimiento. Piezas reemplazables y desgaste controlado.
Comparación entre puerta seccional y levadiza convencional

La puerta seccional también brinda una experiencia más cómoda: abre y cierra de forma silenciosa, no invade la calle y mejora la estética de la fachada. Esto es clave en viviendas modernas y proyectos comerciales.

Aunque inicialmente pueda parecer más costosa que una levadiza, a mediano y largo plazo suele ser la opción más rentable gracias a su durabilidad, menor mantenimiento y mejor desempeño.

Por todo esto, la puerta seccional no es solo “más moderna”, sino un sistema completo que optimiza espacio, seguridad y valor del inmueble.

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